La verdad es que no sé ni por dónde empezar a hablar de Freiburg. Esta ciudad fue como un segundo hogar para mí. Mi historia con Freiburg comenzó hace varios años, incluso antes de convertirme en una nómade digital.
Mi Primera Visita a Freiburg
Después de recibirme en Bioquímica, y debido a que no obtuve ninguna de las becas de doctorado a las que me postulé, apareció la posibilidad de hacer la Maestría Internacional en Ciencias Biomedicas (IMBS). Esta maestría es un programa conjunto entre la Universidad de Buenos Aires y la Universidad de Freiburg.
Así que apliqué y fui aceptada tanto para el programa como para la beca. El master consistió en 6 meses en Buenos Aires y 6 meses en Freiburg, después de lo cual es posible elegir hacer tu tesis en una u otra ciudad.
Para ser honesta, en ese momento ni siquiera sabía dónde estaba exactamente Freiburg ni qué esperar de esa experiencia.
Empezamos el master y volamos a Freiburg en un grupo de 16 potenciales científicos. Algunos de ellos se convirtieron en buenos amigos y algunos incluso en compañeros de vida. Exploramos Freiburg (y muchos otros lugares en Europa) todos juntos.
Creo que hablo en nombre de muchos de mis compañeros cuando digo que nos enamoramos de Freiburg. Durante nuestros estudios, visitamos lugares increíbles, vimos tanto en verano como en invierno y formamos parte de varios eventos académicos de alto nivel.
El día que dejé Freiburg al finalizar la maestría, no pensé que volvería pero, una vez más, la vida me demostró que estaba equivocada. Regresé no una sino 5 veces más.
Dos años después de haber terminado el master y ya haciendo nuestros doctorados, mi novio regresó a Freiburg como parte de su proyecto de investigación y yo lo acompañe durante casi 2 meses mientras escribía mi tesis.
La Importancia del Networking y de Aportar Valor
El año siguiente, después de terminar mi doctorado y, básicamente, estar desempleada y un poco perdida, volví a viajar a Freiburg esta vez quedándome durante casi 4 meses. En este momento de mi vida ya sabía que quería convertirme en un editora científica, pero todavía no sabía exactamente como.
Como dice la gente, hay que estar en el lugar correcto en el momento apropiado. Durante esta última estadía en Freiburg, mi carrera como editora comenzó a tomar forma.
Era un día lluvioso en Freiburg y estaba acompañando a una amiga a visitar a sus antiguos colegas de la Universidad y, básicamente, cuidando a su (hermoso) niño de 1 año. Sin esperarlo, el ex-director del IMBS se me acercó y me ofreció formar parte del equipo editorial de JOSHA, una revista interdisciplinaria que había fundado hacía menos de 1 año.
Ese encuentro no solo fue uno de los primeros pasos en mi carrera como editora científica, sino también el comienzo de mi relación profesional con el IMBS para enseñar comunicación científica a los estudiantes de meastría en Freiburg.
Al año siguiente volví a Freiburg para trabajar como asistente en la Winter School de la maestría y para dar el taller de comunicación científica 2 años seguidos, incluso después de convertirme en nómade digital y estar viviendo en Praga.
Reflexiones
- Todas estas oportunidades surgieron por estar presente, establecer contactos con personas de la comunidad científica y aportar valor. Nunca se sabe quién, cuándo o cómo nos ofrecerá nuestra próxima oportunidad.
- Formar parte de programas interdisciplinarios como el IMBS también abre muchas puertas, tanto en investigación como en la industria.
- Al comenzar un nuevo camino profesional, el formar parte de organizaciones sin fines de lucro y/o participar como voluntario/a en ese area puede ser un paso hacia nuestro objetivo profesional.
- Freiburg particularmente tiene un ambiente y una comunidad científica ideales tanto para científicos como para nómades digitales.
Espero que mi historia te haya inspirado a considerar Freiburg como tu próximo destino. Prometo que no te vas a arrepentir! 😉
Con amor,
Euge
PD: Si vas a Freiburg, no dejes de ir por un brunch a Omas Küche!
