Muchos me preguntan por qué hago locuras como meterme en bañeras con hielo y hacer inmersiones en agua helada (como en la Antártida), así que pensé en compartir las razones y los beneficios de estas prácticas.

El estrés

Seguramente todos sabemos lo que es el estrés y muchos lo asocian con algo negativo, pero no todo tipo de estrés es malo. 

Pensemos en el origen de nuestros mecanismos de estrés. Nuestros antepasados vivían una vida tranquila como cazadores-recolectores pero se exponían a las amenazas de grandes depredadores. Ante la presencia de, digamos, un león (estímulo estresante), sus cuerpos frenaban todas las actividades no esenciales para la supervivencia. Aumentaba la adrenalina y el cortisol, que son nuestras hormonas del estrés, toda la sangre y la energía del cuerpo iba hacia los músculos para preparar la huida en cuestión de segundos. Es un acto reflejo. Una vez que lograron (con suerte) escapar del león, estos mecanismos se apagaban y podían volver a un estado relajado.

Lo interesante, es que hoy en día nuestros cuerpos (nuestra fisiología) siguen funcionando de la misma manera, pero no estamos escapando de leones para salvar nuestras vidas. Los estímulos estresantes en nuestra vida son el trabajo, llegar a fin de mes, el tráfico, las noticias, las preocupaciones diarias; y estos estímulos no nos dan respiro, están constantemente activando nuestros mecanismos de estrés y no permitiéndonos pasar la mayor parte de nuestro tiempo en un estado de relajación donde las prioridades del cuerpo son la digestión, la inmunidad, el metabolismo, la detoxificación, la reproducción, etc.

Pero como les contaba, hay diferentes tipos de estrés. El término hormesis o estrés positivo se refiere a momentos breves de estrés que nos permiten aumentar nuestra resiliencia, o sea ser más fuertes frente a estímulos de estrés futuros.

El frío es uno de estos estímulos y uno bastante poderoso. 

El Método Wim Hof

En 2017, conocí por primera vez el Método Wim Hof (WHM). Wim Hof o el hombre hielo (para quien no lo conoce hay un excelente documental de Vice en YouTube) tiene records mundiales por permanecer en agua helada durante casi 2 hs, nadar bajo el hielo, escalar el Everest en shorts y ser inmune a la inyección intravenosa de la bacteria E. coli.

Pero lo más importante no es que él sea el único en el mundo que puede hacer esto, sino que enseña abiertamente que todos podemos hacerlo si practicamos los fundamento del Método Wim Hof.

• Exposición al Frío

La exposición al frío comienza una cascada de beneficios para la salud, que incluyen la activación de la grasa parda (responsable por la termogénesis o mantenimiento de la temperatura de nuestro cuerpo debido a la producción de calor en respuesta al frío), pérdida de grasa blanca (los “rollitos”), disminución de la inflamación, estimulación del sistema inmune, disminución del estrés, mejora en la calidad del sueño y producción de endorfinas que naturalmente mejoran nuestro estado de ánimo.

• Técnica de respiración

El segundo pilar del Método Wim Hof es la respiración. Siempre respiramos, pero no nos damos cuenta de su enorme potencial. El aumento del oxígeno en nuestro cuerpo genera más energía, menos estrés y estimula la respuesta inmune para combatir virus y bacterias.

En 2019, los científicos Kaelin, Ratcliffe y Semenza recibieron el Premio Nobel de Medicina por el descubrimiento de los mecanismos celulares mediante los cuales las células se adaptan y regulan la activación de ciertos genes en respuesta a la cantidad de oxígeno disponible. Y esta es justamente la base científica del WHM.

• Foco mental

El tercer pilar es la base de los otros dos: tanto la exposición al frío como la respiración consciente requieren paciencia y dedicación para poder dominarlo completamente. El foco mental y la determinación nos permiten dominar nuestro cuerpo y mente.

Beneficios de la exposición al frío o termogénesis inducida

• Alivia dolores en articulaciones, huesos y músculos
• Prolonga la vida
• Mejora la circulación
• Mejora la performance física y mental
• Reduce el riesgo de diabetes
• Mejora el ánimo y reduce la depresión y ansiedad
• Acelera la recuperación de las lesiones físicas
• Fortalece el sistema inmune
• Ayuda a bajar de peso

¿Cómo practicar la exposición al frío?

Vamos de los más simple a lo más avanzado:

• Terminar la ducha con agua fría por 30 segundos e ir aumentando el tiempo gradualmente
• Ducharse con agua fría
• Sumergir la cara en un bowl con agua y hielo durante el tiempo que podamos aguantar la respiración y repetir 3 veces
• Sumergirse (hasta por encima de los hombros) en una bañera (o similar) con agua y hielo, permanecer al menos durante 1 minuto e ir aumentando gradualmente
• Bañarse en aguas heladas naturales (como en la Antártida)

Lo más importante durante cualquier de estas prácticas es permanecer calmo, respirando profunda pero naturalmente y llevando el foco mental hacia una sensación placentera o, al menos, satisfactoria.

Mi experiencia personal

A pesar de haber nacido en Rusia, toda mi vida fui muy friolenta pero desde que empecé a practicar el WHM y a desafiar mis propias limitaciones frente al frío, no solo lo soporto mucho mejor sino que además me genera satisfacción superar mis propias barreras mentales. 

Sin embargo, el mayor beneficio del WHM no es lograr ser más resistente al frío, sino es ser más resiliente frente a la vida. Tanto la exposición al frío como las técnicas de respiración me hicieron salir de mi zona de confort y desafiar mis propios límites físicos y mentales, y me hizo sentir que nada es imposible.

¿Te animás a desafiar tus límites?