Toda mi vida traté de ser perfecta y de aparentar alguien que lo tiene todo resuelto. Por otro lado, siempre admiré y me sentí inspirada por aquellos que se permiten ser vulnerables, ser transparentes sobre quiénes son realmente. Pero, yo no era una de esas personas. Veía la vulnerabilidad como una debilidad.
Una de mis primeras lecturas desde que me uní a Homeward Bound fue Dare to Lead de Brené Brown y su charla TED sobre vulnerabilidad. Aprendí que para ser una buena líder, tenía que estar dispuesta a mostrarme como realmente soy. Así que, aquí va!
No soy perfecta. No tengo todo resuelto. No sé cómo alcanzar mis sueños más grandes en la vida. No sé cómo salvar nuestro planeta. Simplemente no lo sé.
Durante muchos años, hice lo posible para mantener mi vida profesional y personal aparte. Era una científica, pero no estaba pudiendo usar ese conocimiento para ayudarme a mí misma ni a otros. Quería hacer una diferencia en el mundo, pero no era lo suficientemente valiente para mostrarme ya que tenía miedo de que la gente me viera como realmente soy, con mis defectos y dificultades. Tenía amplios conocimientos sobre salud, pero no los compartía con otros porque no creía que estuviera calificada. Hice todo lo que pude para ocultar mi interés por yoga, acroyoga, meditación, dietas saludables y biohacking porque no quería que me vieran como un bicho raro. Sentí que no me tomarían en serio como científica si empezaba a compartir mis pasiones personales. Así que me guardé todo ese conocimiento para mí.
Crecí en una familia que se veía perfecta desde afuera, pero en realidad luchamos con una historia familiar de adicción y recién aprendimos a comunicarnos entre nosotros hace aproximadamente 2 años. Tuve una carrera científica exitosa, pero no sentía que lo que estaba haciendo fuera significativo y perdí el interés. Solían llamarme “la chica de los 1,000 amigos” pero nadie realmente me conocía. Quería que mi vida fuera diferente, pero no lo suficiente para hacer el esfuerzo. Mi deseo más profundo siempre ha sido tener mi propia familia y ser madre, pero no pude crear una relación significativa para hacerlo posible. Defiendo la comunicación sincera, abierta y transparente, pero me han mentido incluso mis personas más cercanas.
Quizás te preguntes por qué estoy compartiendo todo esto. Bueno, soy un todo (akhanda, como aprendí recientemente durante mi profesorado de yoga) y tengo que hacerme cargo de mis historias si quiero que otros me conozcan y confíen en mí. Si quiero ser una líder, debo aceptar mi pasado para crear un futuro mejor. Y, no me arrepiento de nada en mi vida porque me hizo la persona que soy hoy.
“Hacernos cargo de nuestra historia puede ser difícil pero no tan difícil como pasar nuestras vidas huyendo de ella. Abrazar nuestras vulnerabilidades es arriesgado pero no tan peligroso como renunciar al amor, la pertenencia y la alegría, las experiencias que nos hacen más vulnerables. Sólo cuando seamos lo suficientemente valientes como para explorar la oscuridad, descubriremos el poder infinito de nuestra luz.”
Brené Brown
Y hay más… Actualmente, soy una biohacker y comunicadora en salud, pero a veces como comida chatarra. Sé que consumir alcohol tiene un efecto muy negativo en mi salud y suelo juzgar a los que toman, pero también lo hago. Sufrí de asma hasta los 25 años y todavía fumo de vez en cuando. Soy profesora de yoga pero no practico yoga todos los días. Estoy en contra de la industria farmacéutica, pero si tengo un fuerte dolor de cabeza, tomo analgésicos. Predico la sustentabilidad, pero aún sigo comprando productos envueltos en plástico. Lucho contra el cambio climático, pero soy consciente de mi enorme huella de carbono debido a todos mis viajes.
No hago esto todo el tiempo, pero no soy perfecta y, a veces, hago cosas que sé que no son las mejores para mí o para el medio ambiente. A veces hago esto por ignorancia, a veces porque es más fácil o socialmente aceptado. A veces porque simplemente soy humana. Reconozco lo bueno y lo malo en mí, y hago todo lo posible para convertirme en una mejor versión de mí misma cada día. Quiero aprender cada día y compartirlo con tantas personas como pueda, para que todos podamos convertirnos en mejores versiones de nosotros mismos para nosotros y nuestro entorno. El primer paso para cambiar, es tomar conciencia.
“Sé el cambio que deseas ver en el mundo.”
Mahatma Gandhi
En los últimos años, pasé momentos difíciles así como experiencias transformadoras. Desde dejar mi trabajo, terminar una relación y dejar mi país, hasta aprender meditación Vipassana, hacer un profesorado de yoga en India, peregrinar el Camino de Santiago y viajar por el mundo como nómade digital. Todo esto (y más) me hizo la persona que soy hoy. Todo lo que sucedió en mi vida, sucedió por una razón.
Solía evitar hablar con la gente, y ahora me esfuerzo por ser visible, hablar con la gente y hacerles preguntas sin juzgar, porque a mí no me gusta sentirme juzgada. Mis redes sociales estaban llenas de paisajes increíbles porque yo no me gustaba lo suficiente como para subir fotos de mí misma. Ahora, gracias al desafío de visibilidad que acepté como parte de Homeward Bound, me estoy exponiendo y permitiéndome ser vista. A veces tengo que enfrentar juicios o críticas, pero la mayoría de las veces, la calidez y la inspiración de quienes me rodean hacen que todo esto valga la pena.
Ahora, tengo la oportunidad de ser parte de esta experiencia única, junto con 94 valientes mujeres de todo el mundo que luchan contra el cambio climático para salvar este planeta para el bien común. A veces sigo sintiendo que no lo merezco, pero sé que tengo lo que hace falta y que todo lo que sucedió en mi vida hasta este momento fue por una razón. Sé que quiero aprender a ser una líder mejor y más valiente que pueda comunicar el conocimiento científico de una manera que genere un cambio real. Y, confío en este proceso!
¿Qué es diferente para mí esta vez? Esta vez el objetivo es más grande que yo, es más grande que todas las mujeres en Homeward Bound. No podemos posponer más las necesidades de nuestro planeta. Esta es nuestra casa. Porque no hay planeta B.
No soy perfecta. No lo sé todo, pero estoy aprendiendo. No soy una experta en cambio climático, no conozco todas las soluciones, pero lo que sí sé es que nuestro planeta nos necesita y tiene que ser AHORA. Sé de ciencia y aprendí a comunicarla. Y tengo fé en que todos nosotros podemos generar el cambio que nuestro planeta necesita.
Quiero empezar a ser el cambio que deseo ver en el mundo. Quiero comenzar conmigo misma, auditando mi estilo de vida y aprendiendo lo que puedo hacer para marcar la diferencia. Quiero colaborar con todas estas mujeres increíbles de todo el mundo y aprender de ellas. Quiero desarrollar la líder en mí que he estado escondiendo durante mucho tiempo. No sé que traerá el viaje a la Antártida, pero sé que “la madre naturaleza necesita a sus hijas” … ¡y yo estoy aquí para ella! Y, si un día tengo hijos, quiero que mis hijos vean y disfruten el mundo como lo conocemos hoy, o incluso mejor, si eso es posible.
Sé que puedo hacerlo. Sé que juntos podemos hacerlo. Y estoy lista para dar ese salto.
Con amor,
Evguenia
“No es el crítico el que cuenta; no es el hombre que señala cómo tropieza el hombre fuerte, o dónde el autor de los hechos podría haberlo hecho mejor. El crédito es del hombre que está realmente en la cancha, cuya cara está manchada por el polvo, el sudor y la sangre; quien se esfuerza valientemente; quién se equivoca una y otra vez, porque no hay esfuerzo sin error y falta; quien realmente se esfuerza por hacer las cosas; quien conoce grandes entusiasmos, grandes devociones; quien se esfuerza por una causa digna; quién, en el mejor de los casos, conoce el sabor del triunfo de un gran logro, y quién, en el peor de los casos, si falla, al menos falla por atreverse, de modo que su lugar nunca será con esas almas frías y tímidas que no conocen ni la victoria ni la derrota.”
Theodore Roosevelt
1 comentario en “Simplemente No Lo Sé”
Hermoso relato y hermosa mujer. Me identifico con mucho de lo que has expresado Evge…gracias por compartir el camino y tambien por iluminar las zonas oscuras. Te abrazo